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Dos manos grandes le agarran la cintura por detrás y León deja caer su cabeza hacia el hombro del alfa. Cierra los ojos, aspira el aroma de Harry y arroja los últimos pétalos al agua. Harry le lame la nuca, marcando la fuente de aroma del omega con sus poderosas feromonas y León, con las rodillas débiles y el cuerpo convertido en puros escalofríos, se recuesta sobre la superficie de piedra que bordea la gran bañera del mismo material. Harry no dice nada a excepción de sus respiraciones pesadas y el sonido chicloso de los besos. Baja la ropa de León con caricias y besa el camino que deja libre, posando sus labios sobre la columna del chico y bajando hasta queda arrodillado; le baja la ropa del todo, pasándola por sus piernas, tirándola donde sea, y luego se pone en pie de nuevo y muerde los hombros del chico, su nuca, el inicio de su espalda. León disfruta de todo sin un solo rechiste y se voltea cuando escucha el roce de la ropa del alfa. Encuentra a Harry desnudo, sudoroso y con un poco de sangre en el hombro y en el muslo. León lo besa desenfrenadamente, prendido por cómo se ve su cuerpo tras el entrenamiento. Algo en su respiración pesada, las heridas y el rostro serio e intimidante de su alfa lo vuelve loco, no loco de amor, como su gentileza y amabilidad, sino otro tipo de locura. Más primitiva, más animal.

Recorre las cicatrices del alfa con los dedos, primero por el cuello, luego el pecho, el vientre y... vuelve a subir la mano mientras baja y lame esas antiguas heridas. Pasa la lengua por las cicatrices del pecho mientras ronronea y Harry se muerde el labio y le acaricia la cabeza.

—Eres tan hermoso y tan caliente —le susurra a León, besándolo en la boca mientras lo toma por la cintura y lo alza hasta que este se aferra a su cuerpo. —, cuando el cortejo termine, mi omega, más vale que los dioses se tapen los ojos para no ver todo lo que haré con ese cuerpo divino que tienes.

—¿Y a mí? —pregunta seductor, mordiéndose el índice. Harry empieza a entrar en la bañera con el chico en brazos. —¿Me taparás los ojos también? —susurra en su oído para después lamer la fuente de olor del alfa, dejando ahí una posesiva marca.

—A ti, León, no sé si taparte los ojos y atarte las manos o probar de qué eres capaz con ellas, pero pase lo que pase voy a dejarte temblando en la cama, incapaz de recordar otro nombre que no sea el mío, sin saber si quieres suplicar por más o pedir que deje de darte tantísimo placer. León, cuando te tome voy a dejar mi nombre en cada parte de tu cuerpo y cuando te muerda clavaré tan hondo mis dientes que tu piel dirá a gritos que ningún alfa estará nunca a la altura de ocupar mi lugar. Voy a hacerte mío y hacerme tuyo, voy a follarte hasta que seas incapaz de pensar en nuestro cuerpos separados.

León se estremece, respira entrecortado y gime con el contacto del agua caliente, hirviendo por las fogosas palabras del otro; su omega lloriquea, le hace ladear la cabeza, anticipando ese esperado momento en que el alfa lo reclame y se lamenta por la espera.

—Oh, alfa... Dices cosas tan sucias, dime ¿Follas tan bien como maldices?

El príncipe exhala impresionado por la promiscuidad de su pequeño siervo, lo nota nervioso y por ambos es sabido que es inexperto, pero no es para nada tímido cuando su naturaleza le exige cosas sucias. Harry lo agradece, cuando León es pudoroso se siente enternecido, pero cuando dice cosas que apenas parecen salidas de esa linda boca su cuerpo entero parece removerse.

El alfa acomoda a León sobre sus piernas, lo acerca a él agarrándolo del pelo con fuerza, pero moderación y lame desde el hueco entre sus clavículas hasta el mentón y al final da una pequeña mordida y susurra:

—No te impacientes, travieso lobo blanco, podría decirte que sí ahora, pero ¿Para qué responderte cuando de aquí a una semana podré demostrártelo?

León se ruboriza y se deja besar, el alfa no dice nada más, él no osa responder, atrapado por la sensual promesa de sus palabras. Ambos se frotan el cuerpo al uno al otro, sin ser vulgares, pero sugerentes en extremo. Harry le roza la entrada con los dedos a León y cuando lo nota tensarse aprieta un poco, recordándole que pronto perderá su virginidad. León cura las heridas de su alfa con toques cuidadosos y casi pueriles, pero mientras se acerca más de lo necesario, deslizando sus muslos, su trasero y su propia virilidad contra la del castaño. Los ojos verdes de Harry lo miran enturbiados, con una mezcla entre adoración y amenaza, un silencioso <<Sigue siendo tan tentador y cederé>>. León termina por lamer las heridas de su amante, en el hombro y el muslo, pasando su lengüita hasta que el alfa suspira de alivio. La saliva de los omegas siempre palia el dolor, pero con León el efecto es poderosísimo, como una droga.

Tras el baño ambos se secan, se visten y salen del castillo cuando ningún miembro de la familia real está mirándolos; salen de nuevo junto a Kajat y Nath, como si fuesen sus compañeros de fechorías. León y Harry pasean amenamente hacia el lugar donde ambos bailaron durante la celebración del fuego, viendo como algunos ciudadanos les abren paso allá por donde van y reverencian al gran príncipe. León se estresa porque los ven tomados de la mano y eso despierta una ola de susurros. Intenta zafarse, él no quiere crear rumores que dañen a Harry, él...

—Ni se te ocurra —ordena el alfa en voz baja, apretando su mano —. Avergonzarte de ti mismo es algo no voy a permitirte ¿Entiendes? Ahora mira al frente y camina como el hombre que eres.

León traga saliva, aprieta la mandíbula y así lo hace, eso despierta nuevos susurros; los intenta ignorar, aunque le hacen sentir nauseas por los nervios. Una cosa es que Harry baile en la danza del fuego con su siervo al que quiere tirarse, al fin y al cabo, es un ritual sexual, otra que es que lo vean meses más tarde cogiéndole de la mano como si fuesen al altar. León sabe que cuando el rey vuelva harán oficial su relación, pero de todos modos está inquieto.

Cuando León se da cuenta Nath y Kajat están a lo lejos, vigilando los alrededores y él y Harry se hallan solos en la gran zona arenosa, donde Harry le besa los nudillos y le dice:

—¿Me concedes otro baile? Antes de rezar a los dioses cálidos debemos bailar como llamas de un gran fuego.

—Daré lo mejor de mí —sonríe amablemente León —, dioses, este es mi baile.

Ambos vuelven a moverse frenéticamente, como la última vez, solo que ahora la única música es la aceleradísima sinfonía de sus respiraciones. Descalzos sobre la arena dibujan formas incomprensibles, líneas anudadas, y levantan granos de arena que se arremolinan entorno a ellos cuando Harry hace girar a León o cuando gira con este en brazos. Su cuerpos se separan, se unen, se besan mientras Harry le aprieta la cintura y gotas de sudor caen a la seca tierra como ofrenda a los dioses. León lucha por no tropezarse, pero toma iniciativa: tira de las manos de Harry cuando quiere un movimiento cercano, se aleja, como huyendo entre saltitos, cuando desea que el alfa lo persiga danzando y, al final, acaban los dos en el suelo rodando y riéndose mientras menean sus cabezas para quitarte la arena.

—Eso ha sido divertidísimo —anuncia León con una enorme sonrisa y su nariz rubicunda —¿Y ahora? —añade, respirando con dificultad.

Harry lo saca de encima suyo y se le sienta delante con las piernas cruzadas, une sus manos y dice:

—Es hora de hacer nuestras peticiones a los dioses ¿Quieres empezar? —León abre los ojos con sorpresa y está a punto se negar rotundamente, pero se lo piensa mejor y dice que sí. —Bien, no debes dirigirte a ellos de ninguna forma especial, simplemente abre tu corazón y deja que las palabras fluyan. Los dioses no conocen formalismos, solo sentimientos sinceros.

—Divinidades del fuego —León suspira, algo inseguro, pero se envalentona. —, pido por favor que el príncipe Harry no sea jamás abatido en combate, que sus garras den muerte a todo aquel que pretende hacerlo con el primero y que su vida sea larga y apacible en sus días finales; pido que en las épocas calurosas, donde la vegetación crece y los animales se reproducen, su reino sea próspero y jamás haya hambre bajo su mandato; pido que su fogosidad y su lujuria... que... —León flaquea, su voz se convierte en un hilillo y termina diciendo: —que pueda engendrar descendencia en mi vientre. Por favor.

Harry se inclina para besarle la frente y le acaricia una mejilla.

—Lo has hecho muy bien, amor mío —le susurra con honestidad, después es él quien junta sus manos y cierra sus ojos. —Mis grandes dioses de todo lo que arde, pido que la llama del amor entre este hermoso lobo blanco y yo no se apague nunca, que cuando estemos lejos el lazo nos mantenga estrechamente unidos y que por cada separación ninguna de nuestras vidas se consuma; pido tener éxito en mis guerras y poder regresar siempre a casa con mi omega. Mis dioses, suplico abundancia para este reino que será hijo nuestro e imploro que el calor de esta relación puede dar lugar a una hermosa familia. Mis dioses del fuego, León es el ser más brillante que ha cautivado nunca mi mirada, no hagáis que se apague nunca.

El omega mira a Harry con lágrimas en las ojos y lo abraza, conmovido por sus palabras, aullando agudamente por su alfa y este lo acoge entre sus brazos y lame su nuca, recordándole que siempre estará ahí, incluso si muere, su amor no lo abandonará.

La ceremonia es corta, tal como León había pensado, pero su intensidad es tal que no puede pensar en otra cosa por el resto del día y cuando se va a dormir y ve al apacible y agotado rostro de su alfa, que lo corteja a la par que gestiona la falta de un rey en palacio, llora de felicidad de nuevo.

Fin del cap owo ¿Os ha gustado?

¿Qué os han parecido las peticiones a los dioses?

¿Os gusta como he construir el mundo y las tradiciones de los lobos? ¿Algún consejo de worldbuilding o crítica que me queráis hacer para que mejore en el próximo libro?

¿Qué creeís que sucederá más adelante?

Muchas gracias por leer, nos vemos la semana que viene owo 

POR CIERTO: hace poco @YLeyd_JJ me mencionó la maravillosa idea de hacer un server de discord para mis seguidores, ya que ya tengo un grupo de FB, un blog, un twitter... pero el discord ofrece una forma de comunicación más directa donde muchos de mis lecotras podréis hablar entre vosotros (por voz y chat escrito) y conmigo (escucharé los chats de voz, pero responderé por escrito), podreís recibir por ahí avisos de actualizaciones, adelantos, etc... un poco de todo, ya veréis que el server es muy completo y con muchos apartados.

YLeyd_JJ ha hecho un trabajón impresionante con el server y lo ha dejado todo hermoso, super bien ordenado, completo y muy chulo en general. Hoy hemos estados dándole los últimos retoques y comprobando que vaya todo bien yyyyyyyy ¡Ya está listo para que os podáis unir!

Dejo el link aquí, pero si no os va, lo he publicado también en mi muro: https://discord.gg/hhbESUt2